Vamos a hablaros de otra bulbosa que se planta en otoño y que florece de finales del invierno a principios de la primavera. Os hablamos de Muscari.

Flores de Muscari.

También es conocida popularmente como Nazarenos por la típica coloración de sus flores, que pueden ir del azul al violeta, aunque existen algunas variedades de flor blanca. Ha sido muy utilizada como planta ornamental desde hace siglos, y muy valorada también como flor cortada, no sólo por el sutil perfume que posee, también por su delicadeza y su color. Como flor cortada es muy utilizada en ramos de novia, también es muy apropiada para composiciones intimistas y con mucho detalle. Se trata de una bulbosa de pequeño tamaño procedente de las zonas meridionales de Europa y Asia occidental que no suele superar los 25 cm de altura. Suele vivir en zonas templadas, en suelos rocosos y bien drenados. En regiones de clima más cálido está mejor en zonas de sombra o semisombra, en regiones con climas más fríos estará mejor en zonas algo más soleadas, ya que necesita temperaturas de entre 10º y 25º para florecer.

Detalle de flor de Muscari.

Es una planta ideal para crear macizos en el jardín o como planta de rocalla, ya que se repoducirá fácilmente creando grupos compactos que florecerán año tras año. Es una bulbosa poco exigente en cuanto al suelo, pero precisa tener un buen drenaje, como la mayoría de bulbosas, para evitar que los bulbos se pudran por un exceso de humedad. Es recomendable plantar los bulbos entre mediados y finales del otoño, es decir, desde mediados de Noviembre hasta finales de Diciembre. El Muscari necesita pasar un periodo de frío invernal antes de florecer en los primeros días de clima primaveral. Es recomendable enterrar los bulbos unos 5 cm, para que queden protegidos de las heladas, y a una distancia entre sí de unos 7 cm, para dejar espacio a los bulbillos que nacerán después. Debemos regar moderadamente, con más frecuencia durante la floración, pero evitando siempre que el suelo permanezca encharcado. Una vez terminada la floración, esperaremos a que las hojas se queden amarillas, esto indicará que el bulbo termina su ciclo. En este punto podemos sacar los bulbos y conservarlos en un lugar fresco y oscuro hasta el otoño siguiente, o dejarlos en la tierra. Si decidimos dejarlos en la tierra es preferible regar poco o nada esa zona hasta el otoño. Si están en una zona de sombra pueden pasar el verano sin riegos. Si están situados en una zona de sol, será recomendable dar pequeños riegos durante el período más caluroso del verano para evitar que los bulbos se sequen demasiado. Aunque el Muscari vivirá sin problemas en todo tipo de suelos durante muchos años, si queremos floraciones abundantes será recomendable aportar al suelo un abono orgánico en invierno al menos una vez cada dos años.

Plantas de Muscari en maceta.

El Muscari también se pude cultivar en interior, pero habrá que dejar los bulbos en el exterior durante el invierno para que el bulbo tenga su periodo de frío invernal. Una vez comenzada la brotación al final del invierno podremos llevarlos al interior. Necesitarán buena luz, incluso algo de sol, y temperaturas suaves sin sobrepasar los 25º. Por lo demás, no necesitará de más cuidados, y podremos disfrutar de sus bellas y perfumadas flores al comienzo de cada primavera.

Ababoles

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